Por C.
La televisión ofrece muchas opciones. Dentro de los shows de lucha libre, me quedo con Smackdown. El otro programa, su gemelo malvado, se merece todos los abucheos.
Lo peor del programa eran los campeones en pareja: una dupla de 3 (gracias a la regla «freebird» que lo hace posible). Me cansé de ellos muy rápido. Se les dio un push desmedido. ¿Era por la mercancía que vendían, por la aceptación de los niños en esta era PG? Rompieron el récord el lunes de la semana pasada. 482 días de puro aburrimiento para el público más adulto.
Ese reinado (y la manera en la que vendían estar cerca al récord) le quitaba toda emoción a sus luchas. Era obvio que iban a ganar siempre. Curiosamente solo perdieron luego de alcanzar el récord. Otro elemento que les juega en contra son las 3 horas de transmisión. Se siente que hay dos horas de relleno donde solo importa el final (y la preparación del mismo). ¿Los cruceros? Deberían buscar la forma de incluirlos más. Quizás haciendo que opten por los títulos en pareja. Neville tiene credibilidad para ser campeón crucero y retador a los títulos en pareja. Otros que deberían buscar esos premios son Zami Zyan y Strowman (Sheamus y Cesaro cuajaron bastante bien). Bueno, ¿mejor así que como relleno, no?
Y resulta decepcionante que el final sea solamente… bueno. Ni excelente, ni destacable. Solo bueno (y predecible). Kevin Owens (bastante bueno), Roman Reings (ha mejorado un poco), Rollins (excelente) y Jericho (aceptable) nos entregan un espectáculo impropio para la calidad que deberían demostrar. Hasta un Ellsworth contra Aj Styles emociona más.
3,5/10
(veré si para antes de Wrestlemania han mejorado)