Barcelona se la comió entera perdió ante un Real Madrid concentrado.
*”Mirar en Youtube”. Hacer click sin miedo.
Primer round: Real Madrid le mete 3 al Barcelona en el campo nuevo Camp Nou por la Copa del Rey. Jordi Alba evita la goleada al final.
Mourinho puso a su mejor equipo y a Coentrao. Mourinho les dijo que circularan el balón inteligentemente. El equipo pareció simular el estilo holandés del fútbol total. Cristiano Ronaldo estuvo imparable. Varane se confirmó como un galáctico en ciernes. Diego López jugó bien. Coentrao defendió.
Guardiola el segundo de Pep Tito Roura parece confirmar que Pep Guardiola sí aportaba algo a un equipo que decían podía ir en piloto automático y ser invencible. El bajón comenzó en Milan donde perdieron 2 a 0. Se prolongó en la Copa con un Messi opacado por Ronaldo. Estuvimos ante un Barcelona que casi no disparó al arco. Se decía que el equipo catalán era prácticamente un organismo vivo que se autoorganizaba. Pero no existe ese orden espontáneo y hoy Barcelona lo sufre porque no tiene técnico (Tito está en el hospital y Roura está no habido). Roura no da la talla. Ni Messi ni Xavi ni Iniesta son líderes. En cambio, Mourinho ha sabido crear un equipo a su imagen y semejanza, y a entronado a su “hijo” Cristiano como el líder en el campo. Y si con eso no basta, tiene al español vasco Xabi Alonso que en la Copa estuvo impecable.
El primer gol fue de Penal. Cristiano ante sutano el suplente de Valdez. El portero trató de confundir al portugués con sus clásicas trampas con sus gestos amanerados con un repertorio de amages alguna vez efectivos. Gol. GOOOOOOOOOL. GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL. La cámara hizo un primer plano al decepcionado portero. Cristiano sonreía.
El segundo gol se dio gracias a la velocidad de Di María que desbordó a uno de los defensas (no recuerdo cuál, da lo mismo porque los 4 jugaron muy mal). Sale el portero a obstruirle la visión frontal pero no la periférica (grave error). El argentino (o sea Di María) se desprende de la pelota a escasos metros del arco. (La pelota) choca con el portero. ¡La pelota rebota! Cristiano, de casualidad, aparece a la derecha, controla con el pecho, toma el balón, lo acomoda, deja que uno de los defensas vaya al arco, deja que el portero se pare, deja que el portero salté para ponerse al medio y dispara al medio. Gol. Barcelona todavía podía complicar las cosas. Necesitaba 3 goles. No, claro que no, estoy bromeando.
El tercero gol (y el definitivo) fue obra del senegalés portugués francés Varane, la jovensísima apuesta de Mourinho (y de Zidane que recomendó su contratación). Un cabezazo perfecto. Adiós, Barcelona.
Real Madrid B > Barcelona por la liga. 2 a 1 a favor de los madridistas. Real Madrid ya ganaba antes de los 10 minutos. Valdez se volvió loco.
No pude ver este partido pero asumo que:
Mourinho puso en marcha lo trabajado durante los entrenamientos. Las debilidades del Barcelona figuran ya en sus pizarras. A los 6 minutos, el puertorriqueño francés Benzema ya metía. 1 a 0. Y se iba por más. La posesión del balón no era normal… del todo.
Kaká confirmó que está para el retiro. ¿Se bajará el sueldo? Tuvo un partido deplorable. Se le notó cansado. Se le vio extraño con la camiseta del Real Madrid. Los pases buenos fueron buenos. Pero los pases malos fueron como de un jugador del Castilla (equipo de segunda del Madrid). Kaká, acostumbrado a la banca, parecía confundido. Las cámaras, de vez en cuando, lo ponchaban. Kaká mirando el césped, mirando el cielo, mirando la banca. Kaká impotente.
-foto de archivo (la que siempre ponemos)-
Cristiano jugó poco pero volvió a ser la estrella de su equipo. Pocas asistencias pero pensadas al milímetro. Dos faltas peligrosas (una acarició el travesaño y la otra fue evitada por pura suerte). Cristiano derrochó un glamour que recordó al mejor Zidane. Gambeteó poco pero las pocas veces que lo hizo fueron para atacar la confianza del enemigo. Los defensas, timoratos como nunca, “terminaron pidiendo la hora”. Sergio Ramos puso el 2 a 1 de cabeza y fue el fin.
Terminó el partido y Valdez fue a gritarle improperios a un árbitro que no lo hizo tan espantosamente mal. El árbitro le sacó amarilla pero Valdez “pedía” la roja. Petición cumplida. El Bernabéu coreaba el nombre de Cristiano (bueno, algunos). “Quédate, Mourhinho” fue el grito de algunos hinchas madridistas. “Lárgate, Kaká” fue algo que corearon unos cuantos hinchas del Madrid. Por cierto, no hubo penal de Ramos.
Valdez y su roja
El Pelotudo
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