Manifiéstate, bicentenario (19/12/2020)

Por Bryan Cóndor

 

El 2020 cuenta ya sus últimos días, sin embargo, las luchas y las reivindicaciones ciudadanas y laborales parecen recién empezar.  Y es que las manifestaciones ciudadanas que empezaron el pasado mes de noviembre en contra del régimen Merino – Flores – Aráoz fueron apenas el comienzo de una ola que alcanzó una nueva cresta el 30 de noviembre, con el paro agrario. La precarización de las condiciones laborales en Ica, producto de la ley Chlimper obligó a los trabajadores que laboraban bajo ese régimen a alzar su voz de protesta. El descontento se extendió hasta otras regiones y provincias como Piura, Apurímac, La Oroya, Tacna, Puno y La Libertad, donde las movilizaciones se cobraron la vida de Jorge Muñoz Jiménez (19) quien fue asesinado de un tiro en la cabeza producto de un proyectil de plomo.

Una gran parte del sector empresarial y de la prensa acusaron a las izquierdas de estar ‘azuzando’ las movilizaciones e incluso las comparó con el terrorismo. ¿Será cierto eso? ¿Es este un nuevo plan de George Soros ft los Illuminati ft los reptilianos ft el Foro de Sao Paulo para imponer la ultraizquierda en la región y de paso el nuevo orden mundial? Veamos.

 

Episodio I: El terruqueo

 

En Ampliación de Noticias, programa de RPP, Benjamín Cilloniz comparó las manifestaciones en Ica con el terrorismo que sufrió en los 80. Tal fue su desatino que Fernando Carvallo, uno de los presentadores de dicho programa, tuvo que intervenir.Sin embargo, luego aparecieron otras voces señalando a las izquierdas de ser instigadoras de estas movilizaciones. Para Eduardo Arroyo, presidente del Colegio de Sociólogos del Perú, la izquierda no tiene ese poder de convocatoria y no se trataría más que de la paranoia derechista, opinión que comparte Silvio Rendón, economista y responsable de Gran Combo Club. ‘’Los trabajadores se encuentran mucho más organizados que la izquierda, pero desde luego que hay militancias de base de la izquierda que son parte del movimiento social y tienen roles líderes. Lo que no es cierto es que la protesta sea una mera maniobra o prolongación del congreso en su animadversión con el ejecutivo’’. sostuvo. Y, a propósito, me hizo recordar aquel chiste que rezaba que,’’ la izquierda no puede organizar un lonche vía Zoom y va a organizar paros a nivel nacional “.’

 

Rendón comenta que, si bien la crisis de la  covid19 y la crisis política han sido el detonante del descontento social,el origen de estas viene de lo que él llama ‘’tres décadas de neoliberalismo extremo’’, opinión que coincide con la de Eduardo Arroyo, quien señala al régimen fujimorista como responsable de debilitar organizaciones como los sindicatos, los partidos políticos y de precarizar las condiciones laborales.

 

Arroyo  también alude a lo que llama ‘la nueva peruanidad’: ‘’En el cuadro de crisis está surgiendo la idea de una nueva peruanidad que plantea que el peruano promedio -en medio de la pandemia- abraza a su esposa, sus hijos y sale adelante en base a su trabajo. En ese cuadro brotarán más problemas y (…) y  van a seguir reventando si Sagasti no toma cartas en el asunto. Y seguirán reventando hasta julio.’’ manifestó.  Y, a propósito, cabría añadir un comentario de Rendón: ‘’ Hay la percepción que se pueden lograr cosas con la movilización. Y es una percepción correcta.’’

 

Episodio II: Los sindicatos – y los que se suben al coche-

 

En una reciente entrevista para la revista Caretas, la expresentadora y actual candidata al Congreso por Juntos por el Perú, Sigrid Bazán, planteó la necesidad de crear nuevos sindicatos y de más presencia de Sunafil (Benjamín Cilloniz también habló de Sunafil, pero para echarles la culpa de no fiscalizar. Sí pues) Al respecto, el presidente del Colegio de Sociólogos del Perú dijo lo siguiente: ‘’Debería haber una justa sindicalización. Un justo trato entre los trabajadores y el estado a través de sus sindicatos – prohibidos bajo el régimen fujimori-  y un salario justo. Hay una gran desproporción entre la canasta familiar y el sueldo básico. Alan García nos equiparaba con China, pero ahí después del crecimiento, subió el sueldo básico. Aquí no’’. Sin embargo, para el autor de Gran Combo Club, no es suficiente: ‘la fiscalización no es suficiente sin un amparo legal para la defensa de los derechos laborales. Es necesario primero recuperar el consenso de que la defensa de los derechos de los trabajadores tiene que ser reconocida legalmente. Bazán no ha sintonizado tan bien con esta defensa antes de esta campaña electoral.’’manifestó. Cabe recordar que uno de los problemas que presentaron las negociaciones fueron, precisamente, la falta de representantes sindicales con los que negociar.

 

Episodio III: La venganza de los C

 

Parte de la estrategia del sector empresarial fue no darse por enterados de las pésimas condiciones de sus trabajadores y pasar esa culpa al sector informal. Al respecto, Rendón comenta: ‘’ es imposible que los empresarios no sepan de las condiciones laborales en sus empresas. Cero credibilidad a esas declaraciones. Son unos cínicos explotadores’’. Y añade Eduardo Arroyo: ‘’aquí hay clase dominante, no clase dirigente. La clase dirigente es saber qué recursos, qué humanos hay en el país y sobre eso crear un proyecto nacional. Aquí han dominado, no dirigido. Para dirigir necesitas una plataforma y ellos nunca tienen una gran plataforma.

No tienen la menor idea y viven alejados de los intereses de la gente. Los gobiernos del futuro van a tener que pensar en la gente.’’.

 

Episodio IV: ¿Una nueva esperanza?

 

El paro agrario devino en la derogación de la ley Chlimper, un régimen al que muchos atribuyen el llamado boom agroexportador. Y aunque hay un nuevo proyecto de ley agraria que, entre otras cosas, plantea establecer en s/.58 el sueldo de los trabajadores incluyendo gratificación y CTS, consultamos a nuestros entrevistados sobre cómo debería plantearse este nuevo régimen laboral. Jorge Carrillo, economista y docente de la Pacífico Business School señala que ‘’el nuevo régimen laboral debe implicar un aumento progresivo tanto de las remuneraciones como del impuesto a la renta’’ Al respecto,el también economista Silvio Rendón señala que ‘’tiene que haber un régimen más balanceado. Se tiene que recuperar la idea que los trabajadores no solo deben recibir un salario decente, sino también participar de las ganancias a las que contribuyeron a crear. En el sector agrario no ocurre que reciban un salario decente y menos que participen en las ganancias. A los mismos empresarios les gusta decir que la gente no gana lo que se merece sino lo que negocia. Mejorando las condiciones de negociación de la clase trabajadora se puede llegar a una mayor participación en el incremento de la productividad en el sector. Hoy por hoy, la participación del trabajo en el aumento de la torta ha sido muy baja.’’

 

Bonustrack: ¿Por qué estás que te vas y te vas y no te has ido?

En su columna ‘’Lecciones sobre el paro agrario’’ (Hildebrandt en sus trece, 11/12/2020) Carlos León Moya señala que la amenaza de algunos empresarios de irse con todo y capital a producir en otro lugar de la región es una estrategia propia de ese sector. Pero, ¿qué tan viable es eso? ¿Por qué no se van, no se van del país?

Jorge Carrillo señala que no es tan fácil llevarse el capital, ya que implica vender todas las inversiones, tales como terrenos, máquinas, etc. ‘’Es que ya tienen un costo hundido -comenta-, no es tan fácil mudarse a otro país’’ , opinión que coincide con la de Rendón. ‘’es una amenaza nada creíble. ¿A dónde se lo llevarían ? ¿A Chile?  Tal vez los empresarios chilenos hagan eso, pero allá también se les viene la noche. Tampoco es fácil ni tan viable sacar el capital del país, menos en el sector agrario. Otra vez cero credibilidad.’’ sentenció.