Este año el número de muertes por Selfies han sumado más que las muertes por feminicidio (aunque dirían que algunas están conectadas).
Según un estudio, cita en el artículo original, que acá nos da pereza de citar a pesar de que escribimos más palabras de las que nos tomaría hacerlo, en el 2016 las muertes por selfie han subido un montón. Uff, bastante, en números extensos, de varias cifras (la exacta está en la fuente).
Entre las muertes por selfies hay las clásicas “me tomo foto delante del carro en medio de la pista”, “me tomo foto con esta paloma muerta en la pista”, “me tomo foto mientras caigo por el barranco” y, la más común, “me tomo foto en la calle con mis amigas ponemos cara de pato y en el fondo hay un tipo con cara de violador”.
Los países en los que es más común, al parecer fue en Pakistán (con sus “me tomo foto durante el conflicto y ojalá no me caigan balas”) en la India (“me tomo foto con minifalda”) y en Estados Unidos (“me tomo foto con el niño blanco que entra corriendo al colegio con un arma en la mano”).
Según estudios peruanos, hasta la muerte de Ciro del Colca habría sido porque este se quiso tomar selfie en el borde del barranco. Lo malo fue que tenía activado el flash.